Detox
Las toxinas de las que todos hablamos son compuestos químicos invisibles: están presentes en el aire que respiramos, debido a la contaminación ambiental, pero también en el agua, frutas, vegetales y productos derivados de animales. Los medicamentos también pueden liberar toxinas, así como muchos alimentos naturales y especialmente los industriales, llenos de aditivos alimentarios, como colorantes y conservantes.
Muchas toxinas, sin embargo, son producidas por el propio cuerpo, de una manera completamente natural, como resultado de procesos biológicos. Las toxinas que el cuerpo produce espontáneamente son las sustancias residuales de los procesos metabólicos, es decir, aquellas que son constantemente eliminadas por las células de nuestro organismo, como los productos ligados a la transformación de los alimentos en energía.
Estamos, por lo tanto, constantemente intoxicados tanto por fuera como desde dentro. La intoxicación endógena, que viene de nuestro cuerpo, produce toxinas resultantes de la asimilación de alimentos y está compuesta por agua, dióxido de carbono y sustancias nitrogenadas provenientes de las proteínas. Algunas de las toxinas son removidas por los pulmones a través de la respiración, como es el caso del agua y el dióxido de carbono, mientras que el resto es procesado por el hígado y los riñones y eliminado a través de la orina y las heces.
La naturaleza creó diferentes maneras de defendernos contra esos ataques continuos que recibimos tanto fuera como dentro de nuestro cuerpo. El cuerpo humano evolucionó de tal forma que vive una purificación constante. La desintoxicación de metales pesados, sin embargo, es una misión difícil para el organismo.
Las micropartículas del mercurio, plomo o arsénico, se depositan en los órganos y no pueden ser removidas por los procesos de desintoxicación endógenos. Una dieta detox y purificante se centra principalmente en limpiar el cuerpo de las toxinas y no en perder peso. Perder peso puede ser una consecuencia natural de una dieta desintoxicante pero debemos tener cuidado con los aspectos nutricionales. La desintoxicación debe llevarse a cabo con la ayuda de un profesional para que el cuerpo no sienta falta de vitaminas o minerales.
Desintoxicar el cuerpo es de suma importancia en los días de hoy. Nuestros procesos naturales de desintoxicación son capaces de mantener un organismo sano principalmente para aquellos que tienen una vida activa. Un hígado sobrecargado por una nutrición inadecuada, un estilo de vida sedentario o una respiración hiperventilada o reducida debido al tabaco, no dejará el cuerpo purifica-se correctamente.
El mundo de hoy es particularmente rico en contaminantes a varios niveles: agua, aire, alimentos contaminados, pero también debemos considerar en esta lista el ritmo de vida acelerado, el estrés, la falta de sueño y desequilibrios hormonales, entre muchas otras causas.
Todo parece estar en contra de nosotros, pero en realidad hay muchas cosas que hacer para garantizar la desintoxicación eficaz y mantenernos con una buena salud. La intoxicación por agentes internos o externos es capaz de causar enfermedades degenerativas, inflamaciones crónicas y tumores. Es por eso que la desintoxicación es esencial. ¿Cómo podemos protegernos de esos peligros?
Una desintoxicación eficaz debe incluir:
• Actividad física regular
• Saber manejar el estrés
• Reposo nocturno regular y sincronizado con el ritmo circadiano
• Una fuente de alimentación balanceada
Tener una vida activa, practicar un deporte, así como Yoga y meditación, hacer ejercicios de relajación y respiración, dormir bien y no exagerar en el ritmo de vida, puede ayudar mucho a desintoxicar el cuerpo. Pero la nutrición es fundamental para esta purificación.
Debemos primero evitar el alcohol y limitar los alimentos grasos. Y luego centrar nuestra alimentación en alimentos ricos en antioxidantes, capaces de neutralizar los radicales libres que el hígado produce y que pueden causar inflamaciones que lo dañan. Debemos consumir verduras y frutas de la estación, especialmente los más amargos, que estimulan la secreción de bilis, la descongestión del hígado y ayudan al intestino.
La desintoxicación debe ser gradual, para no someter al organismo a un gran choque. Para ello, es útil disminuir gradualmente, hasta la completa eliminación, la ingesta de estos alimentos:
• Fritos
• Salchichas y fríos
• Queso, leche, productos lácteos
• Carne roja
• Dulces y comidas azucaradas
• Bebidas y jugos industriales
• Grasa saturada
• Alimentos no orgánicos y procesados
• Productos refinados
• Aditivos
• Café y estimulantes
• Gluten
• Suplementos y medicamentos no prescritos por un médico
Desayuno: En una dieta purificadora, el desayuno se compone de frutas y verduras frescas, cereales sin gluten, como avena y trigo sarraceno, semillas oleaginosas y frutos secos. Podemos también beber zumos detox o una leche vegetal.
Comida: Consumir vegetales estacionales, mejor si están crudos, acompañados de cereales sin gluten, pseudo-cereales como quinoa, legumbres (como guisantes) y tubérculos (como boniato).
Cena: Preparar pequeñas porciones de pescado cocido al vapor que se puede alternar con una dieta similar a la de la comida, que incluye grasas saludables, como el aceite de oliva, el aguacate o las semillas oleaginosas.
Meriendas y snacks: si tienes hambre a mitad de la mañana o de la tarde, puedes prepararte batidos detox con vegetales verdes, manzana, kiwi y añadiendo también algún superalimento, como las algas Clorela y Spirulina.
Una dieta equilibrada y una actividad física constante pueden estimular los procesos naturales de desintoxicación, pero no pueden hacer mucho contra los metales pesados y otras toxinas. Es por eso que la naturaleza nos ofrece otras soluciones. Son tan simples que están presentes en nuestro planeta hace millones de años. Estamos hablando de microorganismos como las algas, que, gracias a su estructura, pueden conectarse a las toxinas y expulsarlas de nuestros órganos.
Estos son los mejores superalimentos para desintoxicar y purificar el cuerpo:
Spirulina: conocida desde hace milenios, la Spirulina es capaz de eliminar toxinas sin privar el cuerpo de nutrientes. Rica en vitaminas, sales minerales, como hierro, magnesio, antioxidantes. Con una clorofila potentísima y más del 60% de proteína, la Spirulina es la mejor opción para una desintoxicación eficaz.
Clorela: un alga muy similar a la Spirulina, rica en proteínas y en clorofila. La Clorela se considera como un alimento completo y es uno de los desintoxicantes naturales más poderosos.
Hierba de trigo: se obtiene a partir de plantas de trigo de alrededor de 10/15 días, no contiene gluten y posee todas las propiedades de una planta. Es justo después de nacer que la hierba de trigo presenta las mayores propiedades nutricionales, como vitaminas, sales minerales y clorofila.
Hierba de Cebada: es uno de los más ricos alimentos vegetales, lleno de vitaminas, minerales, aminoácidos esenciales y enzimas! Es un poderoso antioxidante, excelente para una desintoxicación sana y natural.
Moringa: en África la Moringa es conocida como un "árbol purificador" y es usada para la purificación de las aguas de los ríos. Las mismas propiedades que hacen de la Moringa una planta excepcional para transformar el agua turbia en potable, permiten también que ella ejerza un efecto de desintoxicación en nuestro cuerpo!
Matcha: El té verde japonés es el más rico en antioxidantes. Como se cultiva en la oscuridad, desarrolla mucha clorofila, lo que hace que sea una bebida desintoxicante con extraordinarias propiedades purificantes!
Todos estos superalimentos detox son fáciles de tomar y muy prácticos: basta con añadir una cucharadita a un zumo de manzana! Puede consumirlos 1 ó 2 veces al día, por la mañana y por la noche, para obtener más resultados.